miércoles, 26 de noviembre de 2014
Que onda profe, ¿como andamos?❤️✌️
La alimentación
Una persona bien alimentada tiene más oportunidades de:
• Vivir con salud
• Aprender y trabajar mejor
• Protegerse de enfermedades.
La alimentación variada asegura la incorporación y aprovechamiento de todos los nutrientes que necesitamos para crecer y vivir saludablemente.
Alimentarse saludablemente, además de mejorar la calidad de vida en todas las edades, ha demostrado prevenir el desarrollo de enfermedades como:
• Obesidad
• Diabetes
• Enfermedades cardio y cerebrovasculares
• Hipertensión arterial
• Dislipemia
• Osteoporosis
• Algunos tipos de cáncer
• Anemia
• Infecciones
1. Coma alimentos variados
2. Base su dieta en alimentos ricos en hidratos de carbono
La mayoría de la gente no toma suficientes alimentos ricos en hidratos de carbono como el pan, la pasta, el arroz, las patatas y otros cereales. Más de la mitad de las calorías de su dieta deben venir de estos alimentos. Pruebe con el pan integral, la pasta y otros cereales para aumentar su ingesta de fibra.
3. Tome muchas frutas y verduras
4. Mantenga un peso corporal saludable y siéntase bien
5. Coma raciones moderadas: reduzca, no elimine alimentos
6. Coma regularmente
Saltarse las comidas, sobre todo el desayuno, puede conducir a una sensación de hambre descontrolada, causando a menudo una sobre ingesta. Realizar una media mañana o una merienda puede ayudar a contener el hambre, pero no coma demasiado para no sustituir las comidas principales. No olvide contar estas tomas como parte de su consumo total de calorías.
7. Beba muchos líquidos
8. Muévase
9. ¡Comience ahora! y realice los cambios gradualmente
10. Recuerde: todo es cuestión de equilibrio
Pirámide de alimentos
Balance energético
Se entiende por balance energético la relación entre el consumo de energía y el gasto energético.
Cuando ingerimos algún alimento estamos obteniendo energía, cuando gastamos la misma cantidad de energía que consumimos en el día, estamos hablando de un balance equilibrado, cuando gastamos menor cantidad de energía de la que consumimos en el día, estamos hablando de un balance positivo, por lo contrario si gastamos más energía de la que consumimos, nos referimos a un balance negativo. Existen ciertas situaciones donde es necesario tener un balance positivo, por ejemplo en el embarazo, lactancia, infancia, adolescencia o cuando por algún padecimiento, enfermedad, o lesión hubo una pérdida importante de peso. Por el contrario es de desearse un balance negativo cuando el aumento de peso puede llegar a niveles no saludables.